sábado, 1 de abril de 2017

Alcohólicos sinónimos

Como es sabido, el Islam prohíbe las bebidas alcohólicas, aunque cada país, emirato o sultanato aplica la veda con mayor o menor rigor. Por un camino u otro, fácil o dificultoso, siempre encuentra uno la manera de echarse un trago. [1]

Alcohólicos sinónimos 1

En Arabia Saudita, por ejemplo, el alcohol está totalmente prohibido por ley: ni comprar ni vender ni consumir… ni siquiera pensar, aseguran. Aun y con eso, las malas lenguas sostienen que en cada hogar saudita existe un alambique o una destilería casera sin nada que envidiar a las utilizadas durante los 13 años de ley seca en los Estados Unidos. Algún artefacto así tendría mi amigo Bob, holandés residente en Riad, porque nunca nos faltó un alcohol de 90º con el que prepararnos unos cubalibres de Pepsi que nos producían unas resacas imperiales. La Coca Cola estaba prohibida para los saudíes en aquellos gloriosos años de mi juventud.

En Bangladesh, al menos en su capital, Dacca, era más sencillo. Existía una tienda, una única tienda cerca del aeropuerto donde los extranjeros, previa comprobación de nacionalidad con su pasaporte, podíamos adquirir bebidas alcohólicas prácticamente sin ninguna restricción. En ella descubrí, junto con mi colega inglés Bentley, el vino Yellow Tail australiano y la cerveza coreana Hite de las que nos hicimos adictos. Carísimo todo, eso sí.

Alcohólicos sinónimos 2En Qatar, donde trabajé una temporada larga, el consumo de alcohol está restringido en todo el país, pero no es imposible. Se puede beber legalmente en los hoteles de 5 estrellas que albergan restaurantes y discotecas autorizadas. A la entrada te piden el pasaporte para demostrar que eres un extranjero documentado y porque existen restricciones, aunque no tengo muy claro en qué consisten. En la recepción anuncian que las mujeres qataríes no están autorizadas a entrar en esos lugares pecaminosos, ni solas ni acompañadas.

Lo más curioso en Doha es la licorería o, como la llamábamos con cariño, “la tienda de los borrachos”. He dicho "la" porque solo hay una en todo el país y para acceder a ella necesitas una docena de papeles y documentos previos a la concesión de la tarjeta que te autoriza a entrar y a comprar. Un guardia de seguridad prohíbe el acceso a quien no posea la cartulina.

Alcohólicos sinónimos 3Como disponía de un visado oficial de la Qatar Petroleum, pedí a mi jefe su necesario permiso sí, necesario el permiso de tu jefe para solicitar la tarjeta–. No fue una buena idea. El tipo era un afgano de luenga barba y ojos de loco, peregrino a la Meca sin faltar cada año. No me lo concedió. Le puse a parir, en español, claro, para que no me entendiera las referencias a su puta madre y cosas por el estilo. De hecho, nadie tenía la tarjeta allí, ni moros ni cristianos.

Sin embargo, mi otro jefe, el de la consultora internacional que me había contratado para aquel trabajo, y que se pasaba todo aquello por el arco del triunfo, me dio el permiso sin ninguna pregunta. Había que presentar también el contrato, porque la autorización solo permite un determinado gasto al mes, proporcional a tu salario. Cuando entregas a la autoridad correspondiente estos documentos y algunos más, incluyendo copia notarial de todas las páginas del pasaporte, te preguntan, muy interesados, por tu religión. No estoy seguro de que autoricen a todo el mundo pero sé que algunos a los que les gustaba chupar no se atrevían a pedirla. No quedaría muy bien llamándose Mohamed o Mustafá.

Si el establecimiento es ya un lugar de pecado, todavía hay una zona donde éste alcanza cotas mucho más elevadas: la sección del cerdo.

Pero esa es otra historia que les contaré en otra oportunidad.


IMÁGENES: Arriba, brindis con tinto. Centro, sencillo alambique de fabricación casera. Abajo, botella de vino australiano.

[1] Una azafata de aerolínea europea me aseguró que todos los vuelos que despegan de algún aeropuerto del Golfo llevan una provisión doble de bebidas alcohólicas y que, aún así, resulta difícil llegar a Europa con algún sobrante. Existen pasajeros que se pasan todo el vuelo libando lo prohibido. Eso sí: todos se declaran musulmanes islamistas rigurosos en sus respectivos países.

Fuentes: Gulf Times y experiencia propia.

1 comentario:

José Ignacio Fito dijo...

Eres un pozo de anéctodas querido Félix, me quedo salivando esperando tu reseña sobre el cerdo en los países musulmanes. Un abrazo.